viernes, 23 de mayo de 2014

A ROBERTO GONZALES NO LE CREO



Dicen que: “No hay nada oculto entre el cielo y la tierra”, y que al final la verdad tarda pero llega. Este es el caso de Roberto González “Canela” quien tiene una vida pública llena de oscuras historias y señalamientos que en la Guatemala de la “amnesia histórica” se olvidan, pero que están allí como esqueletos encerrados esperando ver la luz.

Por Luis Martínez Balcárcel

El actual candidato a la presidencia por el club de gansters CREO, tiene un costal de acusaciones, algunas públicas y otras que solo se comentan en voz baja, pero todas coinciden en señalar un dudoso proceder en su paso por la administración pública. Las travesuras de Roberto González le hacen honor a su sobre nombre de “canela fina”. Esta es la crónica de un ladrón institucional, y espero con ella contribuir a dibujar correctamente la imagen de quien se presenta como un salvador pero que realmente ha sido un gánster político.

. COMPRA SOBREVALORADA DE SEMÁFOROS COMO JEFE DE EMETRA

A Roberto González se le acusa de haber realizado una compra sobrevalorada de semáforos para la ciudad capital, en complicidad con la empresa mexicana TRADECO. El encargado de intermediar en dicho negocio fue Oscar Berger hijo y según se comenta ambos se beneficiaron con más de Q5 millones con dicha compra.

COMPRA SOBREVALORADA DE BUSES ROJOS DENOMINADOS TOMATES

Una vieja herida que todavía sangra, en la municipalidad de Guatemala y que todavía se comenta ya que a través de una empresa mexicana fantasma, se hizo la transacción de un lote de buses rojos que se les dio en llamar TOMATES. Los buses vinieron al país con especificaciones por debajo de las establecidas en las especificaciones de la compra. Dicha compra significó un endeudamiento de los contribuyentes de Q1,000 millones que a la fecha se siguen pagando con intereses altísimos y al final los buses fueron a parar a botaderos de chatarra y la propuesta nació de la imaginación de Roberto González, pero este modelo que “Canela” quiso implementar fracasó. La deuda estaba programada para que los empresarios del transporte pagaran por los buses. Sin embargo, ante el fracaso del modelo, la deuda tuvo que ser asumida por el Estado con recursos de los ciudadanos.

CONTRABANDO EN ADUANAS A TRAVÉS DE LA SOSEP

Durante el gobierno de Oscar Berger, se hizo la denuncia pública de la utilización de la figura de donaciones hacia la Secretaría de Obras Sociales de la Esposa del Presidente SOSEP. Mediante la figura de donaciones, se ingresaban al país equipos electrónicos, pollo y otro tipo de productos sin pagar impuestos. Incluso, en las investigaciones se mencionaban casos especiales de lavado de dinero. Los encargados de esas operaciones eran Roberto González Díaz-Durán y Ricardo Ortiz, (“LA RUCA”) ambos socios en el negocio de las ofibodegas, la distribución de combustible y perforación de pozos.

MILLONARIAS COMISIONES EN PROYECTOS DE LA RECONSTRUCCIÓN DEL STAN QUE NUNCA FUERON TERMINADOS

El huracán Stan fue sinónimo de desgracia para miles de familias pobres del interior del país. El caso Panabaj será recordado por la indolencia del gobierno de Oscar Berger quien lejos de luchar hasta el último momento por siquiera rescatar los restos de los cientos de campesinos que quedaron soterrados, optó por al declarar el sitio como un cementerio y con una simple ofrenda de flores cerró el tema. Acto seguido, nombró a su mejor pupilo, Roberto González para que se hiciera cargo de la reconstrucción que esa desgracia había dejado en la infraestructura del país. Roberto González estuvo a cargo de ese programa por cerca de un año en el cual no se ejecutó al 100% ningún proyecto y solo se asignaron “a dedo” a través de un acuerdo de emergencia, varios miles de millones de quetzales a empresas de la construcción vinculadas con el presidente Berger, Roberto González y sus amigos.

DE LA CASITA DE LA 20 CALLE A LA MANSIÓN DE MUXBAL Y SU MEGA HOUSE DE LA ZONA 14

Durante su tiempo, como funcionario de la muni, Roberto González vivía en una casa modesta en la 20 calle de la zona 10. Luego de su paso como Gerente de la Reconstrucción y el cobro de comisiones por contratos multimillonarios, construyó una mansión en Muxbal, dotada con todos los lujos acordes a un verdadero magnate, cuando la realidad es que Roberto González

“trabaja” como catedrático de la UFM donde devenga un salario mensual de Q8,000, el cual no le permitiría llevar el nivel de vida que tiene con casas de descanso en: Monterico, Antigua Guatemala y esto pagado con ingresos siempre han provenido del erario público. ¿Cómo le hace para multiplicar el pisto?

LOS NEGOCIOS CON SANDRA TORRES

En la campaña Alvaro colom su socio Ricardo Orits y el negociaron con Sandra Torres el apoyo a Álvaro Colom en la segunda vuelta. Y este apoyo significó para Roberto González, la asignación de varios contratos que fueron ejecutados por su testaferro de obras Oscar Chinchilla y Carlitos “el trance” Fion (quien es investigado por la embajada de los EEUU).

En la elección pasada a la alcaldía, Roberto González reafirmo su alianza estratégica especial con Sandra Torres, mediante la cual, a cambio de un eventual apoyo Roberto González recibe bolsas solidarias para promover su candidatura en los asentamientos de la capital.

EXMIBAL UNA VENTA FRAUDULENTA DEL PATRIMONIO DEL ESTADO

Roberto González como Ministro de Energía y Minas propició el remate de la venta de las acciones que el Estado poseía sobre la minera de níquel Exmibal, que posee uno de los yacimientos de níquel más ricos del mundo. El negocio consistió en un supuesto llamado a “capitalizar” a la compañía hecho por los socios canadienses en ese llamado se hacía ver que era necesario que todos los socios hicieran un aporte para iniciar de inmediato las operación de la mina. Sin embargo, se condicionaba a los socios que no acudieran al llamado a capital, que de no hacerlo perdían la posesión y el reclamo del valor de sus acciones. El negocio consistió en que el Roberto González junto con Oscar Berger hijo, decidieron de manera lesiva para los intereses del Estado no acudir a ese llamado a capital en un arreglo conocido como: “compadre hablado” con la compañía canadiense y de esta forma el Estado perdió la propiedad de las acciones dentro de la empresa y, por supuesto, la posibilidad de, como socio, obtener los beneficios económicos que se generen con la extracción del níquel. Al final, la compañía jamás inició operaciones, todo fue un fraude para “regalarle” la empresa a los canadienses. ¿Quiénes fueron los ganadores de este regalo del patrimonio del Estado? Pues Roberto González y Ricardo “la Ruca” Ortiz.

LA LICENCIA DE EXPLOTACIÓN PARA MONTANA EXPLORADORA

Cuando Roberto González se convierte en Ministro de Energía y Minas al llegar a su despacho, tenía en su escritorio el expediente de la aprobación de la licencia de explotación para Montana Exploradora. Sin embargo, dicha aprobación había sido hecha de manera fraudulenta porque no contaba con la aprobación final del estudio de impacto ambiental ni había cumplido con el requisito de consulta a los pueblos indígenas establecido en el Convenio 169 de la OIT. Sólo 15 días antes de dejar el poder, mediante una negociación bajo la mesa, Alfonso Portillo había dado la orden para que dicha licencia se aprobara a marchas forzadas en el MEM. Cuando Roberto González llega como ministro, lejos de corregir la plana  y enviar el expediente de vuelta al MARN y a la PGN para que se pronunciaran sobre los requisitos de ley incumplidos. Se comenta en voz baja en el MEM, que Canela nuevamente negocio una jugosa “indemnización” para guardar silencio y dejar que la Mina Marlin se instale en San Marcos sin haber agotado todos los pasos de ley. En esta negociación también participó Oscar Berger, y ambos se vieron beneficiados económicamente en detrimento de nuestros recursos naturales.

EL NEGOCIO DE LOS TAXIS AMARILLOS, LOS SILOS DE INDECA Y LA PORTUARIA

Roberto González tiene dentro de sus socios a Rodolfo Neutze Aguirre. A este su amigo de infancia, le otorgo una concesión cuando Canela era director de EMETRA para operar los taxis amarillos, de los cuales ambos son propietarios; negocio que floreció ante la protección monopolística que durante dos períodos les garantizó la administración en la muni de Oscar Berger y Roberto González como director de EMETRA. Luego, a través de las influencias que ambos manejan con el partido de gobierno y con Sandra Torres, lograron que les remataran los silos que pertenecían a Indeca y ambos incursionaron en el negocio de almacenamiento y venta de granos sobrevalorados para abastecer el programa de la bolsa solidaria. Finalmente, se comenta en círculos cercanos a la portuaria que Roberto González y Neutze dirigieron una red de negocios en la Portuaria Quetzal que incluyen la construcción de obra física y cobro de comisiones, hasta el alquiler de maquinaria inexistente con contratos millonarios. Neutze fungió como Presidente de esa institución, nombrado a instancias de la influencia de su amigo Canela.

CREO… QUE: ¡NO LE CREO!

Canela es un tipo astuto y muy recursivo, es innegable que como dice su slogan de campaña “tiene experiencia”, el problema es que su experiencia es en las malas artes del desgobierno y los negocios bajo la mesa, por eso definitivamente, creo que a Roberto Gonzales no le “CREO”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario